
Dizang

El Dizang (en chino, 彌勒Jizo), también conocido como Ksitigarbha, es una figura central en el budismo Mahayana, venerado como un bodhisattva que se compromete a liberar a todos los seres sintientes del sufrimiento, especialmente aquellos atrapados en los narakas (reinos de sufrimiento) y los tretas (ciclos de nacimiento, muerte y renacimiento). Su nombre, que literalmente significa "el que ya ha alcanzado la tierra de la iluminación", refleja su objetivo final: la liberación universal. La veneración del Dizang se ha extendido a lo largo de siglos y culturas, con variaciones significativas en su iconografía y prácticas de culto, pero su esencia fundamental – la compasión y el compromiso con la salvación de todos – permanece constante. Este artículo explorará la historia, las enseñanzas, la iconografía y la importancia del Dizang en el budismo Mahayana.
Este artículo se propone ofrecer una visión exhaustiva del Dizang, analizando su papel dentro del budismo Mahayana, sus orígenes históricos, las diversas representaciones artísticas que ha adquirido a lo largo del tiempo, y las prácticas devocionales asociadas a su culto. Se abordarán aspectos clave como la relación entre el Dizang y los narakas, su voto fundamental de salvación, la importancia de su protección para niños y viajeros, y las diferencias y similitudes en su culto entre China, Tíbet y Japón. Se examinarán también las fuentes escriturales que sustentan su veneración, incluyendo los Sutras del Bodhisattva Jizo y otros textos relacionados.
Orígenes e Historia
El culto al Dizang se remonta a los siglos IV a.C. en China, aunque sus raíces se encuentran en las enseñanzas más antiguas del budismo Mahayana. La figura del Dizang como un bodhisattva que se compromete a liberar a todos los seres del sufrimiento comenzó a tomar forma en el contexto de las prácticas de purificación de los espíritus de los muertos, una práctica común en el budismo antiguo. Inicialmente, el culto se centraba en la construcción de monasterios y la realización de rituales para aliviar el sufrimiento de los espíritus de los antepasados y de aquellos que aún estaban atrapados en los reinos inferiores. La idea de un bodhisattva dedicado específicamente a la liberación de los espíritus del narakas surgió gradualmente a medida que el budismo Mahayana ganaba influencia y se desarrollaban nuevas formas de devoción.
El desarrollo del culto al Dizang estuvo estrechamente ligado a la práctica de la purificación de los muertos, una tradición que se extendió por toda Asia Oriental. En China, los monasterios se convirtieron en centros importantes para la realización de rituales de purificación, y los monjes y monjas dedicados a esta tarea eran altamente respetados. La figura del Dizang comenzó a ser representada en esculturas y pinturas, y se le asoció con la protección de los viajeros y los niños, quienes eran considerados especialmente vulnerables al sufrimiento. La popularidad del culto al Dizang creció a medida que la gente buscaba protección contra los peligros del mundo y la esperanza de la liberación del sufrimiento.
Durante la dinastía Tang (618-907 d.C.), el culto al Dizang alcanzó su apogeo en China, con la construcción de numerosos templos dedicados a su veneración. Se realizaron grandes donaciones de tierras y recursos para la construcción de estos templos, y se promovieron activamente las prácticas de purificación de los muertos. La figura del Dizang se convirtió en un símbolo de esperanza y protección, y su culto se extendió a todas las clases sociales. La influencia del Dizang se extendió también a otros países de Asia Oriental, como Japón y Corea, donde se estableció el culto a Jizo.
El Voto Fundamental de Salvación
El núcleo de la devoción al Dizang reside en su "Voto Fundamental de Salvación" (彌勒大 vow), una promesa formal de que, una vez que haya alcanzado la iluminación completa, se dedicará a liberar a todos los seres sintientes del sufrimiento, sin distinción de especie o condición. Este voto no es simplemente una aspiración, sino una promesa vinculante que refleja el compromiso inquebrantable del Dizang con la salvación universal. La naturaleza de este voto es crucial para comprender la motivación y el propósito del Dizang, y es la base de su devoción.
El Voto Fundamental se expresa en varios textos budistas, y se describe en detalle como el Dizang se compromete a construir un puente de cristal que conecta los reinos del narakas y los reinos de renacimiento, permitiendo que los espíritus atrapados puedan ascender y alcanzar la liberación. Este puente, conocido como el "Puente de Cristal" (水晶橋), simboliza la acción directa del Dizang para aliviar el sufrimiento y facilitar la transición hacia la iluminación. La construcción de este puente es un acto de compasión y un testimonio del compromiso inquebrantable del Dizang con la salvación de todos los seres.
El Voto Fundamental no se limita a la construcción del puente; también implica la realización de rituales diarios de ofrendas y oraciones para fortalecer la determinación del Dizang y para invocar su ayuda. Los devotos creen que al realizar estas acciones, están contribuyendo directamente a la realización del voto del Dizhang y, por lo tanto, están acelerando su propia liberación. La práctica de realizar ofrendas de comida, agua y otros objetos a los espíritus de los muertos, en nombre del Dizang, es una parte esencial del culto y se considera una forma de expresar gratitud y respeto.
Iconografía y Representaciones

La iconografía del Dizang ha evolucionado a lo largo de los siglos y varía según la región y la tradición. Sin embargo, ciertas características son comunes a todas las representaciones, y reflejan las enseñanzas fundamentales del Dizang. La representación más común del Dizang es la de un hombre joven, generalmente de entre 20 y 30 años, vestido con ropas sencillas y a menudo con una expresión de compasión y determinación. Esta representación refleja su juventud y su compromiso con la salvación de todos los seres.
Un elemento distintivo de la iconografía del Dizang es el khatikara, un objeto que representa el narakas. Este objeto, que a menudo se asemeja a un demonio o a una criatura infernal, simboliza el sufrimiento que el Dizang está destinado a erradicar. El Dizang a menudo se representa sosteniendo el khatikara en una mano, como una señal de que está derrotando al sufrimiento. Otro elemento importante de la iconografía es el khatikara, que representa el puente de cristal que el Dizang construirá para conectar los reinos del narakas y los reinos de renacimiento.
En Japón, la representación más común del Dizang es la de Jizo, vestido con ropas sencillas y a menudo con un sombrero de paja. Jizo a menudo se representa sosteniendo un khatikara en una mano y un khatikara en la otra, simbolizando su papel como protector de los niños y los viajeros. En Corea, el Dizang a menudo se representa con un sombrero de paja y un bastón, simbolizando su papel como protector de los viajeros. En todas las representaciones, la expresión de compasión y determinación del Dizang es un elemento clave.
El Puente de Cristal y la Purificación de los Narakas

La centralidad del "Puente de Cristal" (水晶橋) en la iconografía y la devoción al Dizang es fundamental para comprender su propósito. Este puente no es simplemente una estructura física; es una metáfora de la acción directa del Dizang para aliviar el sufrimiento y facilitar la transición hacia la iluminación. La construcción del puente simboliza la acción del Dizang para erradicar el sufrimiento y para conectar a los espíritus atrapados en los reinos del narakas con los reinos de renacimiento.
El Dizang se representa a menudo construyendo el puente de cristal con sus propias manos, simbolizando su dedicación inquebrantable a la salvación de todos los seres. La construcción del puente no es un proceso fácil; requiere una gran cantidad de esfuerzo y determinación. Sin embargo, el Dizang está dispuesto a hacer todo lo posible para lograr su objetivo. Una vez que el puente está terminado, los espíritus atrapados en los reinos del narakas pueden ascender y alcanzar la liberación.
La construcción del puente de cristal es un acto de compasión y un testimonio del compromiso inquebrantable del Dizang con la salvación de todos los seres. El Dizang no solo está construyendo un puente físico, sino que también está construyendo un camino hacia la iluminación para todos los seres sintientes. La práctica de ofrendas y oraciones a los espíritus de los muertos, en nombre del Dizang, es una forma de apoyar su trabajo y de acelerar su propia liberación.
Espero que esta información detallada sea útil.
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